La Secretaria General Iberoamericana, Rebeca Grynspan, ofreció el pasado martes en Uruguay la conferencia ‘Hacia los ODS. ¿Qué puede aportar la cooperación iberoamericana?’ El Centro de Formación de la Cooperación Española de Montevideo fue el lugar escogido para la intervención de la máxima responsable de la SEGIB. El encuentro sirvió para hacer balance y reflexionar sobre el camino recorrido por la cooperación internacional desde la formulación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) en el año 2000 hasta nuestros días, con la reciente adopción de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Grynspan, además de analizar en el Centro de Formación el rol de la cooperación iberoamericana en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS), presentó esa misma mañana en el Museo Nacional de Artes Visuales de la capital uruguaya el ‘Informe de la Cooperación Sur Sur en Iberoamérica 2015’.


La economista costarricense defendió el alcance de los ODM subrayando que fue “el mayor esfuerzo que jamás se hizo de manera concertada para combatir la pobreza”. No obstante expuso algunas de las carencias de la anterior agenda, como “la debilidad de la cuestión económica y ambiental”, que ahora quedan reforzadas en la Agenda post-2015. En esta línea recordó que uno de los desafíos más urgentes a los que se enfrenta hoy la humanidad es el cambio climático. Grynspan expuso cómo “los ODS están incorporando de forma decidida el pilar ambiental y el sector privado a la agenda de desarrollo”, algo fundamental ya que “los elementos ambientales van a exigir una manera de producir y consumir que hacen necesaria la implicación del sector privado”. Así, la nueva agenda aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas el pasado mes de septiembre, transversaliza la cuestión ambiental de forma que los 17 objetivos y las 169 metas definidas integran de forma indivisible las esferas económica, social y ambiental.


Grynspan cerró su discurso apuntando la posible contribución iberoamericana a la agenda de desarrollo. En este punto destacó la importancia del legado cultural de Iberoamérica subrayando que “la mejor manera con la que podemos contribuir a la consecución de los ODS es con la cultura de la paz, de la convivencia y de los derechos humanos”. La Coordinadora Residente de Naciones Unidas en Uruguay, Denise Cook, acompañó a Grynspan en su intervención destacando el carácter universal de los ODS y que no establecen supremacías obsoletas. Igualmente participó en la cita el Director de Asuntos Políticos del Ministerio de Relaciones Exteriores del Uruguay, el Embajador Martín Vidal, quien manifestó el compromiso del Ejecutivo uruguayo con el desarrollo y anunció que los Objetivos de Desarrollo Sostenibles se abordarían en Uruguay de forma transversal en las diferentes políticas públicas de los distintos ministerios. Finalmente el Director del Centro de Formación de la Cooperación Española de Montevideo, Manuel de la Iglesia-Caruncho, destacó en nombre del Embajador Roberto Varela Fariña, que “alcanzar los ODS es el mayor reto que en su historia se ha marcado la humanidad” y que “se necesitan recursos y voluntad pública y privada, nacional e internacional para avanzar en la agenda”.

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