Contenido de la noticia

​

Más de doscientos parlamentarios de distintos países del planeta han clausurado hoy martes en Madrid la primera Cumbre Parlamentaria Mundial contra el Hambre y la Malnutrición, un evento en el que se ha reafirmado el compromiso político para lograr que todas las personas tengan acceso a alimentos suficientes y de calidad.

En su intervención en el acto de clausura, el Ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell, recalcó la responsabilidad de los parlamentos en la lucha contra el hambre ya que estos son quienes, con su labor de "constitución de marcos legislativos, formulación de leyes, aprobación de presupuestos y rendición de cuentas" tienen una "importancia capital" para hacer realidad los cambios necesarios y "aglutinar y dinamizar las acciones y establecer las prioridades que reflejen los reclamos de la sociedad".

En opinión del Ministro, "no puede haber desarrollo sostenible, ni paz y seguridad en el mundo, mientras haya casi 821 millones de personas que aún padecen hambre", ya que un solo país que sufre de hambre y pobreza "afecta a sus países vecinos y desestabiliza una región".

Borrell enfatizó que la lucha contra el hambre "es una cuestión urgente para toda la comunidad internacional, para conseguir la paz, el desarrollo y la seguridad y también porque es una obligación moral para todos".

Como ha puesto de manifiesto la Cumbre, promovida por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), las Cortes Generales españolas y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), junto al Frente Parlamentario Contra el Hambre de América Latina y el Caribe, la respuesta al problema del hambre y la malnutrición requiere de una alianza a todos los niveles y una nueva forma de trabajar. En su intervención Borrell ha destacado que el problema precisa de un sistema de gobernanza global fuerte y sólido. "No cabe duda por ello que los parlamentos tienen un papel capital", ha recalcado.

El Ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha subrayado también la "visión de futuro" ofrecida en la reunión para mantener el "sueño" de un mundo libre de pobreza, hambre y exclusión en un "momento histórico marcado por el miedo a lo desconocido.

La Cumbre, además, ha contado a lo largo de sus dos días de duración con la presencia del Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el Director General de la FAO, José Graziano; así como el Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y la Directora de AECID, Aina Calvo; además de representantes de parlamentos regionales de África, América Latina y el Caribe y la Unión Europea.

A lo largo de la Cumbre, se ha hecho un llamamiento a todos los parlamentarios y parlamentarias a establecer políticas, redactar leyes, asignar presupuestos específicos y tejer alianzas y acuerdos encaminados a la consecución de las metas que marca el ODS 2 (Hambre Cero), un objetivo que ha de impulsarse como política transversal en todos los parlamentos.

Asimismo, los legisladores se han comprometido a fortalecer la colaboración entre los países y regiones a favor del Hambre Cero. También se ha urgido a apoyar la producción y el consumo de alimentos saludables, así como a promover la educación y la información alimentaria y nutricional, a fin de reducir la obesidad que conduce a enfermedades no transmisibles y representa una enorme carga para los sistemas de salud y los recursos públicos.