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A lo largo del CoM SSA Day, celebrado en Dakar esta semana, las ciudades africanas dejaron claro que las acciones de adaptación están en el centro de los mandatos de los gobiernos locales, que muchas soluciones para adaptarse al cambio climático se encuentran en la naturaleza y que el costo de no hacer nada es mucho mayor que el costo de su propuesta.

El Pacto de los Alcaldes en África Subsahariana (CoM SSA) a través de su socio co-implementador, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), recibió a más de 300 participantes de gobiernos locales y nacionales, la sociedad civil y el sector privado en el Evento del Día CoM SSA realizado ayer en Dakar (Senegal), en el marco de la Semana para la Movilidad Sostenible y el Clima #SMDC202.

Nombrada como la pre-COP de actores africanos antes de la COP27, la conferencia, de una semana de duración y coorganizada por la Asociación CODATU, CETUD y la Asociación Climate Chance, reunió a más de 1000 participantes de todo el mundo en Dakar, para centrarse en la adaptación al cambio climático a través de la eficiencia energética y soluciones basadas en ecosistemas, con énfasis en las zonas costeras.

El evento CoM SSA Day reflexionó sobre las necesidades y los desafíos que enfrentan los gobiernos locales, pero también presentó diferentes experiencias y lecciones aprendidas por ciudades pioneras del África subsahariana. Winny Dogbatse, alcaldesa de Kloto 1 en Togo y presidenta del Foro Regional de Alcaldes, inauguró el día del CoM SSA junto con la embajadora de España en Senegal y la Secretaría del CoM SSA.

La embajadora de España en Senegal, Olga Cabarga, dijo que si bien "la mitigación es central para reducir el calentamiento global; la adaptación al cambio climático es clave para abordar los impactos que se sienten ahora. El calentamiento global conlleva todo tipo de riesgos. Sus impactos afectarán a toda la población mundial, ya se trate de un aumento en la frecuencia de fenómenos meteorológicos extremos, como olas de calor, sequías o inundaciones, o de la erosión costera debido al aumento del nivel del mar".

El alcalde Dogbatse repitió un mensaje común de los signatarios del CoM SSA; que las ciudades en el África Subsahariana, que representan el 14% de la población mundial, son las más afectadas por los impactos del cambio climático, pero son las que menos contribuyen a las emisiones globales de gases de efecto invernadero y solo reciben 3 % del financiamiento climático global.

No obstante, las ciudades del CoM SSA tienen una visión audaz para un futuro sostenible y resiliente y reiteraron la necesidad de acción y financiamiento de proyectos de adaptación en las negociaciones de la COP27 que tendrá lugar en Sharm El Sheik (Egipto) en noviembre.

A lo largo de las diferentes sesiones del evento, las ciudades del CoM SSA dejaron claro que las acciones de adaptación están en el centro del mandato de los gobiernos locales y que el costo de no hacer nada es mucho más alto que el costo de los proyectos propuestos.

El ingeniero Solomon Noi, de la ciudad de Accra, enfatizó que "las ciudades necesitan desarrollar acciones que aborden temas como la gestión de desechos, la sequía, las inundaciones y el calor extremo; estos no son proyectos que traerán rentabilidad a las entidades financieras, pero son necesarios para mejorar la vida de nuestros ciudadanos".

La adaptación y eficiencia energética de las infraestructuras públicas, y en particular del sector de la construcción, está en el centro de la sostenibilidad climática. Desarrollar resiliencia a menudo requiere una combinación de medidas de adaptación duras y blandas, así como opciones de infraestructura diseñadas y basadas en la naturaleza. Ernest Dione, del programa TyCCAO enfatizó que "la mayor parte de la emisión de CO2 de un edificio se da en la producción de materiales de construcción. El uso de materiales locales de origen biológico contribuyen significativamente al almacenamiento de carbono atmosférico, porque no implica mucha transformación".

Algunos de esos materiales se producen localmente, sin embargo, África también utiliza equipos importados. "Es importante implementar sistemas de etiquetado y calidad adecuados para garantizar que solo los productos energéticamente eficientes ingresen al mercado africano", dijo Monica Maduekwe del ECOWAS Centre for Renewable Energy and Energy Efficiency (ECREEE).

Aunque las ciudades africanas carecen de mecanismos de financiación para la adaptación, aún están tomando medidas porque sus ciudadanos ya se enfrentan al impacto del cambio climático. "En 2017, la degradación de las zonas costeras había costado el equivalente al 7 % del PIB de Senegal, Costa de Marfil, Togo y Benin. Las mareas y el movimiento de sedimentos no conocen fronteras y esto requiere un enfoque regional combinado como lo hace CoM SSA", dijo Nicolas Desramaut del Banco Mundial.

Las ciudades de Dakar y Maputo mostraron los enfoques innovadores que ya están adoptando a nivel local. En Dakar, sin una acción inmediata, enfrentan entre 0,5 y 1 metro de aumento del nivel del mar por año. En respuesta a esta amenaza, utilizan diques para protegerse contra el incremento del nivel del mar.

Maputo está experimentando inundaciones sin precedentes, pero está utilizando medidas de adaptación y soluciones basadas en la naturaleza, como la restauración de manglares para proteger a sus ciudadanos. "El gobierno es consciente de la importancia de proteger y restaurar los manglares y ha definido una estrategia nacional de protección para promover el desarrollo sostenible y contribuir a la lucha contra el cambio climático a través de acciones que también favorecen a la sociedad civil", declaró Cortez Taipo, del municipio de Maputo.

Las ciudades de Maputo, Nouakchott y Kisumu destacaron, en una de las sesiones, la necesidad crítica de procesos participativos en la planificación de acciones de adaptación y mitigación, desde la incorporación del enfoque de género, la inclusión de ciudadanos y ciudadanas de todas las edades, orígenes y con diferentes capacidades en todas las etapas de desarrollo del proyecto.

En una presentación conjunta, Gilda Florentina del Área Metropolitana de Maputo y Loide Atália da Silva Massagaie del Ayuntamiento de Maputo dijeron: "al planificar cualquier proyecto o actividad nos hacemos tres preguntas clave, ¿hemos considerado el género en esta decisión? ¿Es lo mismo para hombres y mujeres? y si no, ¿en qué se diferencia?".

En general, las ciudades demostraron que están predicando con el ejemplo al tomar medidas inmediatas e impactantes, incluida la priorización de la eficiencia energética en sus propios edificios municipales y la mejora del acceso a la energía para sus ciudadanías.