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Tras guardar un minuto de silencio por las víctimas de violencia contra las mujeres en todo el mundo, Pilar Cancela inauguraba esta mañana en Madrid el encuentro La Lucha contra la violencia de género en los contextos humanitarios con el que la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) ha querido conmemorar el Día Internacional de la eliminación de la Violencia contra las Mujeres.

 

La secretaría de Estado, que recordó que en días como el 25N no hay nada que celebrar, destacó en cambio la necesidad de una mayor contundencia en las reivindicaciones feministas, así como la educación como un “elemento fundamental para erradicar la violencia contra las mujeres y las niñas”. “Para no tener que protegerlas a ellas - continuó Cancela-, eduquémosles a ellos”.

El encuentro, que fue presentado por el director de Cooperación Multilateral, Horizontal y Financiera de la AECID, Fernando Jiménez-Ontiveros, y moderado por Miriam Císcar, jefa de Cooperación Sectorial de la Agencia, continuó con la participación de Jaime Nadal, representante del Fondo de Población de la Naciones Unidas (UNFPA) en Afganistán y Myanmar, y antes responsable de UNFPA en Ucrania.

 

“SER MUJER EN SITUACIONES DE CONFLICTO O DE CATÁSTROFES NATURALES, ES UN ENORME FACTOR DE RIESGO” Jaime Nadal, UNFPA

 

Nadal, que participó a través de una video llamada desde Kabul, explicó que parte del mandato de la UNFPA, dentro del sistema de las Naciones Unidas, es velar por la lucha contra la violencia de género en contextos humanitarios, y comentó su experiencia en este campo en los contextos humanitarios alrededor del mundo en los que ha trabajado hasta ahora.

Nadal aseguró que el enfoque de género es un “tema de máxima importancia” en conflictos y otras situaciones de crisis humanitarias, como las de desplazamiento: “lo vimos en Ucrania en 2022 -dijo- cuando el 80% de las personas que cruzaron la frontera eran mujeres”.

“Lo estamos viendo en Afganistán -continuó- donde con los terremotos en Herat, la mayoría de las víctimas fueron mujeres y niños, porque de acuerdo con la cultura patriarcal, las mujeres estaban en sus casas cuando sucedieron los temblores”. Y concluyó: “ser mujer en situaciones de conflicto o de catástrofes naturales, es un enorme factor de riesgo”.

El representante de UNFPA, agradeció el apoyo de la Cooperación Española tanto en el conflicto de Ucrania, con la aportación de ambulancias para facilitar el acceso a salud sexual y reproductiva de las mujeres afectadas por violencia sexual; como en Afganistán, donde la AECID ha posibilitado con su financiación, la atención en salud sexual y reproductiva para mujeres y niñas con puestos de salud en zonas remotas.

 

“LA VIOLENCIA SEXUAL EN LOS CONFLICTOS ES UN ARMA DE GUERRA EVITABLE”, María Jesús Conde, Embajadora para la Política Exterior Feminista

 

Por su parte, María Jesús Conde, Embajadora en Misión Especial para la Política Exterior Feminista de España, explicó que su mandato incluye velar por la Agenda Mujeres, Paz y Seguridad; un compromiso adquirido por España en el año 2000 “con una continuidad como política de Estado y que se acaba de renovar con el nuevo compromiso por una Política Exterior Feminista”.

La Embajadora destacó la evolución de dicha Agenda que ha pasado “de considerar a la mujer como víctima de la violencia a verla también como un actor en la prevención y resolución de los conflictos”.  “En 2022, -continuó Conde- de 20 países en conflicto, el sistema de la ONU revisó 2.455 casos, de los cuales el 94% se trató de violencia sexual contra las mujeres y las niñas”. “Y no son todos los casos -señaló-, no es más que una pequeña muestra, pues dada la carencia de mecanismos de denuncia y frente a la desprotección de las víctimas en conflicto, la mayoría de los casos no se denuncian” apuntó la Embajadora.

“La violencia sexual en los conflictos es un arma de guerra que es evitable. Hay que hacer mucho más como comunidad internacional”, reivindicó María Jesús Conde, y señaló que España apuesta en todos los foros internacionales por contribuir con más recursos humanos y financieros destinados a la prevención y a la respuesta a la violencia sexual en los conflictos.

Conde quiso reportar, durante su ponencia de hoy, el trabajo que viene realizando España  en los diferentes foros internacionales para condenar a los Talibán y pedir el cese de la situación de violencia que padecen las mujeres y las niñas afganas tras su subida al poder en agosto de 2021.

“En febrero de 2022 organizamos en Madrid una conferencia, Hear US, para dar espacio y participación a las mujeres afganas en las decisiones que se tomen con respecto a su país” relató.

“Además, -prosiguió- las Embajadas de España en Irán, Turquía y Jordania, en aplicación del artículo 38 de la Ley de Asilo, han permitido trasladar a España a unas 500 mujeres afganas -juezas, fiscales, periodistas, defensoras de derechos humanos etc.- cuya integridad física estaba en peligro y que a su llegada pudieron solicitar la protección internacional. También hemos conseguido traer a España a 20 jóvenes de la comunidad Hazara cuya escuela fue bombardeada en septiembre del año pasado”.

Conde puso el foco en la necesidad de denunciar este tipo de violencias ante los mecanismos internacionales de justicia. “En el marco de la iniciativa Hear Us -explicó-, estamos trabajando para llevar a los Talibán ante la justicia internacional; por un lado ante la Corte Penal Internacional para denunciarles por delitos de lesa humanidad por la persecución sistemática de mujeres; y por otro ante el Tribunal Internacional de Justicia por la vulneración de la CEDAW y de los tratados internacionales de derechos humanos que protegen a las mujeres junto a otros países y expertos internacionales.”

“También estamos trabajando con la Corte internacional para investigar los crímenes de guerra cometidos en Ucrania por Rusia y somos parte del Grupo de Amigos que lidera las investigaciones en ese país y hemos contribuido al Fondo fiduciario de víctimas en la Corte y a un Fondo ad hoc que se ha creado en la Fiscalía para la investigación de esos crímenes”, finalizó la Embajadora, en su repaso a las iniciativas más destacadas del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y de Cooperación en la lucha contra la violencia contra las mujeres en situación de conflicto.

 

“SOMOS LAS MUJERES AFGANAS LAS VÍCTIMAS DE ESTA GUERRA, HEMOS PERDIDO TODO” Khadija Amín, periodista afgana refugiada en España

 

Khadija Amín, periodista, trabajaba como presentadora y reportera en la tv pública de Afganistán hasta el día en el que los Talibán ocuparon el poder en 2021; feminista y activista por los derechos de las mujeres, actualmente vive en España en calidad de refugiada.

Khadija comenzó su participación con un vídeo que reúne imágenes sobre la situación de las mujeres en Afganistán: No podemos decir que las mujeres allí pueden vivir.

En el encuentro “La Lucha contra la violencia de género en los contextos humanitarios”  la periodista explicó con imágenes que no había restricciones para las mujeres, pero después de la Guerra Civil, la situación cambió. “Y en el 96, cuando los Talibán tomaron el poder, las mujeres perdieron todo. Yo empecé a estudiar en clases clandestinas porque al ser una niña no tenía permiso para ir al colegio. Esas clases clandestinas eran la esperanza de las niñas y 20 años después han regresado a esa situación”.

Kadhija cuenta que las mujeres llevan dos años sin derechos en Afganistán; “somos las mujeres afganas las víctimas de esta guerra, hemos perdido todo”.  “Acudí a mi puesto de trabajo -relata- para presentar las noticias a las 9h, y a las 12h me enviaron a casa. No sabíamos que los Talibán iban a entrar de forma tan fácil en Kabul y a retomar el poder”.

“Las mujeres afganas no han abandonado la lucha, son mujeres luchadoras como todas las mujeres del mundo” dijo la periodista, que señaló que, a pesar de las restricciones impuestas por los talibanes, las mujeres continúan su activismo; salieron en manifestación y algunas fueron asesinadas, otras arrestadas. Ahora las mujeres ya no se manifiestan, pero desde sus casas hacen actos, graban vídeos o toman fotos que nos envían para reivindicar su lucha y mostrar su reivindicación.

 “Hemos luchado durante 20 años por avanzar y cuando hemos sentido un poco de libertad, hemos perdido nuestra vida” dijo Khadija. “¿Cómo se puede olvidar la situación de las mujeres de Afganistán? Vamos a organizar clases para dar educación clandestina a las niñas en Afganistán porque es su única esperanza. Vamos a ver cuánto duran los Talibán en Afganistán” concluyó.

 

LA IMPORTANCIA DEL ENFOQUE FEMINISTA EN LA COOPERACIÓN Y LA ACCIÓN HUMANITARIA

 

Inmaculada Cabello, que trabaja en la ONGD “Mujeres en Zona de Conflicto” (MZC) destacaba la importancia de tres elementos principales para el enfoque feminista: la prioridad política, el personal preparado y el presupuesto. La violencia contra las mujeres y las niñas debe garantizar también el acompañamiento a estas mujeres en zonas de conflicto.

Las mujeres son primordiales como agentes de cambio y necesarias en los procesos de construcción de paz pues, como indicaba Jesús Rogado de la Oficina de Acción Humanitaria de la AECID: “los procesos de paz en los que participan las mujeres son más duraderos”.

Rogado repasó las actuaciones en el ámbito de la lucha contra la violencia contra las mujeres en situaciones de conflicto y crisis humanitarias, para las cuales la AECID reserva el 25% de su presupuesto de acción humanitaria: Además destacó la labor de la Agencia en materia de diplomacia humanitaria y defensa del derecho internacional humanitario.