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Por Leonardo de la Torre y el equipo del proyecto AECID- ISGlobal (Paraguay). Fotos:Aleix Cabrera / ISGlobal

Su voz se alzó clara en la primera reunión: "A uno de mi familia, que era mi papá, esa enfermedad lastimosamente le cobró la vida; por eso, doy mi apoyo si se quiere trabajar". Así habló Francisco González, en octubre de 2022, en nuestra primera reunión con los líderes de las comunidades indígenas de Casanillo, Presidente Hayes, a 500 kilómetros de Asunción. 

En junio de ese mismo año, una intervención del Programa Nacional de Control de Chagas del Paraguay (PNCC) había encontrado vinchucas, chichã guasú, vector del Chagas, en el peri-domicilio de todas las aldeas de Casanillo. Específicamente, en la aldea Capiatá se identificaron al menos cuatro ejemplares de Triatoma sordida infectados con el parásito Trypanosoma cruzi, situación que se había superado en el país. 

Líderes como Francisco González acudieron a la convocatoria de la Unidad de Salud de la Familia de Conactomololac (Casanillo). La intervención del PNCC se había organizado después de que vecinos y personal de USF reportaran el hallazgo del vector infectado a partir de las capacitaciones sobre Enfermedad de Chagas y vigilancia entomológica con participación comunitaria realizadas durante 2021 y 2022, en el marco de proyectos de cooperación ISGlobal-AECID y Adelante2-UE (capacitación en la Plataforma Chagas de Tarija, Bolivia).

 

Talleres de escucha activa en cinco comunidades

 

Entre el 29 de octubre y el 2 de noviembre de 2022, ollas comunes y un show de títeres sobre el Chagas a cargo del Departamento de Movilización Social y Participación Comunitaria del SENEPA, MSPSP, animaron jornadas de encuentro abiertas al total de las comunidades de Casanillo. Las jornadas, co-organizadas junto a los líderes y el personal de la USF, incluyeron talleres de capacitación sobre la enfermedad y, sobre todo, un extenso momento de escucha de los principales problemas de salud que afectan a cada comunidad y de las propuestas de solución identificadas por los mismos participantes. 

La alarmante falta de agua potable en la mayoría de las comunidades, ya denunciada como una emergencia en Casanillo, volvió a se registrada como preocupación de salud. La escasez de alimentos, de más promotores de la salud capacitados y de medios de transporte para emergencias también se denunció de manera reiterada. Entre las enfermedades que preocupan a la población, la palabra Chagas fue la más escuchada. 

"Nosotros, los pueblos originarios, hemos visto: cuando llega el viento norte, siempre caen vinchucas de allí arriba, el viento las trae; y en la época de frío, los bichos pasan toda la noche en la casa", nos explicó en taller el Sr. Chamorro, demostrando el conocimiento del vector que se tiene en comunidad. Lo que él y otros asistentes demandaron era saber qué sucede después. "Sería importantísimo informar; no sabíamos de esta enfermedad", dijo Mauricio Fernández, líder de Casanillo Centro. 

La propuesta del proyecto AECID- ISGlobal fue la de diseñar junto a las comunidades una estrategia de "formación básica y sensibilización en materia de vigilancia entomológica, prevención y acceso a los servicios sanitarios para control de la enfermedad de Chagas". Tal cual expresó al iniciar esta etapa la Dra. Vidalia Lesmo, Jefa del PNCC: "No muchas veces tenemos la oportunidad de cocrear el material junto a las personas. Eso puede generar apropiación y productos útiles".

 

La palabra se mantiene
 

Como expresó Marcial Ramírez, miembro del Consejo Nacional de Salud de los Pueblos Indígenas (CONASAPI), "la palabra se mantiene"; y ahí estuvieron, entre el 23 y el 27 de febrero de 2023, los líderes y las comunidades convocadas para imaginar materiales informativos sobre Chagas adaptados a la realidad y creados con participación de las comunidades de Casanillo. 

"Me gustaría conocer cómo empieza", señaló en ese taller don Marcio Leiva. "Necesitamos material específico que comunique de principio a fin", resumió Sinforiano Ovelar, del Departamento de Entomología del SENEPA, participante en todos los talleres. "Nosotros queremos saber bien sobre esta enfermedad", confirmó don Juancito Coronel, líder de Capiatá. 

La radio fue señalada como el primero de los medios a través de los cuales informar de manera exitosa en las comunidades de Casanillo. A pocos metros de la USF, transmite en Toba, en Castellano y en Guaraní, "Radio Casanillo – 90.3". De hecho, se sumó a la mesa de cocreación el creador paraguayo Nicolás Granada, con años de experiencia en la generación de Podcast para el colectivo El Surti. 

También se apostó por material "con dibujos". "Tenemos que capacitar no sólo a los mayores", anunció don Mauricio Ramírez. En comunidades en las que todavía no llega el refuerzo de desayuno escolar, los profesores propusieron empezar el trabajo en Chagas con los alumnos, en clase". En un taller con profesores, directores, autoridades distritales de educación, padres de familia y estudiantes, organizado en Campo Aceval junto al equipo del proyecto MSPS-PROBITAS-CIRD-ISGlobal, se perfiló un proceso pedagógico que acompañe el material didáctico a ser creado. A través de las tareas escolares, se imaginó efecto multiplicador en la implicación de los padres.  

No todo fue fluido en la ronda de talleres. Según Alejandrino Cardozo, líder de Tres Palmas, "poco a poco pasó el huesito atravesado en la garganta de la víbora" y la gente se fue soltando. Se anotaron recomendaciones para material impreso en toba, guaraní y castellano, se descartó y aprobó tipos de ilustración, se cocreó. El propio diálogo de los talleres, según la facilitadora Benicia Almeida y el equipo CIRD, ya permite momentos de articulación comunitaria para potenciar el acceso en salud. 

Pero el proceso no queda ahí. Tras la ronda de cocreación, se establecieron compromisos. "Lo que anotaste, ¿quedó en el papel o se va a hacer?", nos preguntó don Osvaldo Centurión, en San Rafael. También en Campo Aceval lo aseguró el Prof. Leonardo Fabio Benítez: "No nos va a servir de nada hacer una campaña de la gran siete si luego no podemos ofrecer el tratamiento o no tenemos servicios médicos". 

El proyecto de AECID e ISGlobal propone un estudio de seroprevalencia al total de la población residente en las comunidades de Casanillo, para así identificar a quienes viven con T. cruzi y prestarles la atención médica necesaria. Este estudio piloto no sería posible sin la dotación propiciada por el proyecto MSPS-PROBITAS-CIRD-ISGlobal: infraestructura y equipos para el laboratorio del hospital de Teniente Irala Fernández, centro en el que podrán procesarse las muestras de confirmación de diagnóstico y control durante el tratamiento. 

"Ya no aguanto más. Me parece que voy a enfermar". Así recuerda Rita Maciel lo que le dijo su marido, recientemente fallecido a consecuencia del Chagas. Sus hijos Marcelo y Francisco, líder actual de Campo Aroma, impulsan a su comunidad a diagnosticarse: "Ya no más años perdidos. Si hay resultados, si hay acuerdos, en seguida vamos a participar".