El secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Jesús Gracia, clausuró ayer en la sede de la Agencia Española de Cooperación el acto de conmemoración del 75 aniversario de la biblioteca de la AECID. Un acto que ha contado con la presencia del director de la Real Academia Española, Darío Villanueva, y del secretario General de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Gonzalo Robles, entre otras autoridades.

Gonzalo Robles, encargado de presidir el acto, explicó que la biblioteca de la AECID reúne tres colecciones: la biblioteca Hispánica, Islámica y de Cooperación. Constituye una biblioteca de aproximadamente 1.000.000 de documentos con un perfil de especialización en humanidades y ciencias sociales de América Latina y del mundo árabe e islámico y la cooperación internacional para el desarrollo.

Este perfil responde a los antecedentes históricos de la propia Agencia. Se remontan al Consejo de la Hispanidad creado en el año 1940, transformado en el Instituto de Cultura Hispánica, para estudiar y difundir la cultura hispánica, fomentar el mutuo conocimiento entre los pueblos hispánico e intensificar su intercambio cultural. Posteriormente cambió su nombre por el de Instituto de Cooperación Iberoamericana. En 1946 nace la unidad editorial con el nombre de Ediciones de Cultura Hispánica. Nacieron revistas como Mundo Hispánico, Cuadernos Hispanoamericanos- que aún existe- y el Correo Literario. En 1988 se crea la Agencia Española de Cooperación Internacional y el Instituto Español de Cooperación con el Mundo Árabe pasa a formar parte de la misma.

El SECIPI, durante su intervención, ha recordado el papel fundamental de la Biblioteca a la hora de reivindicar y documentar las importantes aportaciones hechas por España en América, tanto en el campo de la cultura como en el de las más diversas disciplinas científicas.

Ha hecho referencia, asimismo, a los grandes proyectos a los que se enfrenta la biblioteca en la actualidad, que sigue trabajando para adaptarse a los nuevos tiempos: la puesta en marcha de la Biblioteca Digital de la AECID y el Catálogo Cisne, que desde 2012 es compartido con la Biblioteca de la Universidad Complutense, en el espíritu de fomentar la colaboración con otras instituciones.

Tras el acto de clausura, el secretario de Estado ha firmado un convenio con la Real Academia Española de la Lengua, que quiere hacer de la Biblioteca Hispánica la biblioteca de las letras en español, “sea cual sea el acento que dé color y brío a una lengua con la que hablamos, pensamos, sentimos y escribimos más de cuatrocientos millones de personas”.