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Fiesta para la sensibilización del cólera

Caption: Fiesta para la sensibilización del cólera

News title El Fondo, con Haití siempre

Date of publication of the news item 11/01/2012 - 00:00

News categories Agua y saneamiento

Summary of the news Dos años después del terremoto, la ayuda de emergencia da paso a acciones de desarrollo


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En el segundo aniversario del terremoto que devastó Puerto Príncipe y sus alrededores, el Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento ha comenzado a reorientar sus ayudas a Haití, que en los últimos dos años se han destinado a responder a la emergencia, a programas de desarrollo que dotarán al país de un sector público de agua y saneamiento sostenible, eficiente y accesible. España, cuarto donante en Haití, es el principal donante en este sector tan crítico para la salud y la superación de la pobreza del pueblo haitiano.

La necesidad es enorme: más de la mitad de la población de Haití no tiene acceso a agua potable y el saneamiento es prácticamente inexistente, lo que favorece la transmisión de enfermedades como el cólera, las fiebres tifoideas y en general enfermedades ligadas con las diarreas. El impacto de estas condiciones sobre la salud de la población haitiana es uno de los factores que contribuye a que Haití sea el país más pobre del Hemisferio.

Haití sigue siendo el país prioritario para el Fondo, algo que no solamente se refleja en los fondos comprometidos (€172.2 millones), sino también en el importante papel que tiene la ayuda española en la construcción de infraestructuras y en el apoyo a la profunda reforma institucional que Haití lleva a cabo en el sector del agua y el saneamiento. Por la gran envergadura de las reformas, la práctica totalidad de la población de Haití se beneficiará de las acciones del Fondo a largo plazo.

“Dos años después del terremoto y a pesar de las grandes dificultades de coordinación y logística sobre el terreno, la Cooperación Española sigue trabajando codo con codo con las instituciones haitianas para procurar que la población tenga acceso al agua y al saneamiento”,  aseguró Adriano García-Loygorri de la AECID. “Si bien en un principio las actuaciones se centraron en paliar la catastrófica situación post terremoto, hoy en día estamos fijando nuestra mirada en el largo plazo”.

Puerto Príncipe está a punto de inaugurar una planta de tratamiento de excretas construida con ayudas de emergencia del Fondo que depurará una parte importante de los residuos de la ciudad, una planta necesaria también para el servicio de los campamentos de desplazados, donde aún viven más de medio millón de personas. En una visita realizada el pasado octubre a las obras de la depuradora, situada en la comunidad de Titanyen, S.M. la Reina Sofía destacó que “este trabajo demuestra que los dos países han sido capaces de actuar unidos en favor del desarrollo en Haití”.

La Cooperación española trabajando

Durante los últimos dos años, el Fondo reorientó la ayuda que inicialmente iba destinada a programas de desarrollo para responder a la emergencia del terremoto y a la epidemia de cólera que le siguió, garantizando el acceso a los servicios mínimos de agua y saneamiento a los afectados, enviando materiales básicos como sueros, jabón y laboratorios portátiles, ofreciendo apoyo logístico y realizando campañas de prevención del cólera y otras enfermedades de origen hídrico. Parte de estas ayudas también se han destinado a la reconstrucción de sistemas de agua y saneamiento dañados o destruidos por el seísmo y a la construcción de la planta de tratamiento de Titanyen.

El fondo de emergencia del terremoto al que contribuyó el Fondo atendió a 3.5 millones de personas tras el seísmo y contribuyó al envío del primer avión con material humanitario que luego se distribuyó por todas las zonas afectadas a través de las ONG. Se garantizó el cloro para la potabilización del agua y se pagó la distribución gratuita de ésta durante los dos primeros meses tras la catástrofe.

Durante la epidemia de cólera, el Fondo contribuyó a que 5 millones de personas recibieran agua tratada a través del sistema público, y a que se distribuyeran pastillas de cloro que han servido para la desinfección de agua en más de un millón de hogares. Gracias a los esfuerzos conjuntos de actores en este sector, la población de Puerto Príncipe hoy cuenta con mayor acceso al agua potable que antes del terremoto.

Aunque Haití todavía necesita ayudas de post emergencia, las acciones del Fondo se centran cada vez más en la construcción de infraestructura permanente y en apoyar los cambios institucionales necesarios para que el país pueda disfrutar de un sistema público sostenible, efectivo y accesible a largo plazo. Ya están en marcha los estudios de factibilidad y el diseño de los sistemas de agua y saneamiento que darán servicio a las zonas urbanas y rurales más desfavorecidas del país. Estos sistemas extenderán servicios a comunidades rurales como las del Departamento de Artibonite y a las seis ciudades más grandes del país después de Puerto Príncipe.

El Fondo tiene un papel clave en la reforma del sector de agua y saneamiento en Haití. A través de los programas se está dando apoyo técnico y se está dotando de los recursos esenciales a las distintas estructuras que componen el entramado institucional del sector: la Dirección Nacional de Agua Potable y Saneamiento (DINEPA), las Oficinas Regionales de Agua Potable y Saneamiento (OREPA) y las Unidades de Desarrollo Rural (URD). También se está dando asistencia técnica a los operadores de los sistemas de agua de las ciudades principales del país de cara a mejorar la calidad de sus servicios; en Puerto Príncipe ya se han producido avances significativos en esta dirección. Estas instituciones son las responsables de crear un sector capaz de cubrir de manera efectiva las necesidades básicas de la población de Haití en agua y saneamiento.

Con Haití, antes y después

Haití era ya el país más pobre de América Latina y el Caribe cuando un terremoto de magnitud 7.3 en la escala de Richter sacudió Puerto Príncipe y sus alrededores el 12 de enero de 2010. En los 30 segundos que duró el temblor, 222.570 haitianos murieron, otros 300.000 resultaron heridos y 1,3 millones perdieron su hogar. El país perdió el 120 por cien de su PIB.

El terremoto sorprendió  a la Cooperación Española trabajando codo con codo con los haitianos en programas de ayuda al desarrollo destinados a la lucha contra la pobreza.  Antes del seísmo, Haití ya era un país prioritario para el Fondo de Agua, cuyos proyectos incluían la reforma del sector de agua y saneamiento y la dotación de servicios básicos a las zonas rurales y a las poblaciones más vulnerables del país.

Dos años tras el terremoto, la ayuda de emergencia da paso poco a poco a la ayuda al desarrollo.