Panamá cuenta con abundantes recursos hídricos. La mayor parte de las precipitaciones es captada por la red hídrica que integran 52 cuencas hidrográficas y 500 ríos.
Según datos de la Dirección del Subsector Agua Potable y
Alcantarillado Sanitario (DISAPAS) el 74,6% de la población de Panamá se abastece con agua de calidad potable, en muchas ocasiones de forma interrumpida. La discontinuidad en el
suministro es causada en gran parte por el precario nivel de recursos
técnicos y presupuestarios que no permite un adecuado mantenimiento
preventivo ni correctivo de las instalaciones. La calidad del servicio es baja, especialmente en las zonas rurales, en
las que destaca la baja calidad de potabilidad y la discontinuidad del
suministro, particularmente en época seca.
En las zonas de población indígena, las coberturas de agua y
saneamiento son mucho más bajas que en las zonas no-indígenas.La escasez de los servicios básicos ha dejado a las
poblaciones indígenas expuestas a enfermedades asociadas un saneamiento
deficiente (las enfermedades diarreicas son la segunda causa de
morbilidad en estas áreas) y a la proliferación de vectores causantes de
enfermedades como la malaria. Desde 1994 la mayoría de las comunidades dispersas de Panamá cuentan con Juntas Administradoras de Acueductos Rurales (JAAR).
Con respecto al saneamiento, el 86,9% en zona rural tiene algún mecanismo para la evacuación de aguas negras, sea por letrinas, tanques sépticos y (en menor medida) por alcantarillado. Las condiciones
sanitarias de estos sistemas son precarias, y no garantizan la
salubridad de la población. Los datos anteriores muestran las
disparidades de acceso a los servicios de agua y saneamiento entre zonas
urbanas y rurales.
La vigilancia de la calidad del agua para
consumo le corresponde al Ministerio de Salud (MINSA), mediante la DISAPAS. El control de calidad del agua le corresponde a
los entes operadores, entre los que están el IDAAN, la Autoridad del Canal de
Panamá (ACP), algunos acueductos privados y el acueducto municipal de la
comunidad de Boquete y las Juntas Administradoras de Acueductos Rurales (JAAR).